La forma de arrancar una moto de carreras, dado que no lleva ni motor de arranque ni pedal, los cuales se quitan para aligerar, es empujarla y arrancarla sobre una velocidad, o bien, mediante algún aparato que gire el motor para hacer que arranque.
Nosotros, en este caso, hemos construido un arrancador, utilizando una amoladora que funciona con corriente de 220 voltios.
Para comenzar, hacemos un soporte metálico, dónde irán alojados unos rodamientos.
Sobre éstos, girarán unos ejes con unos rodillos de goma maciza, que llevan topes laterales para guiar la rueda y evitar que patine.
Uniendo estos dos ejes, colocamos una correa de goma que consigue que los dos ejes giren al mismo tiempo.
Para conseguir que funcione todo el conjunto, unimos la amoladora a uno de los ejes con una cadena y dos piñones.
Para sujetar la amoladora, utilizamos unos soportes metálicos provistos de una corredera, para poder tensar la cadena.
Como medida de seguridad, le hemos colocado unos protectores en la correa y en la cadena que mueven los ejes.
Por la parte delantera, le colocamos una rampa que nos ayuda a subir la moto y por la parte de atrás, lleva un tope, que puede ser giratorio, que sujetará la moto en el momento del arranque.
En nuestro modelo anterior, el arrancador se ponía en funcionamiento mediante una palanca que se accionaba con el pie, en este modelo, la hemos sustituido por un pulsador eléctrico.
Para esos momentos o lugares donde careces de corriente, tenemos también disponible un arrancador de batería.
Este arrancador no es válido para motos de cross con ruedas de tacos, porque no traccionan sobre los rodillos de goma. Si éste es justo tu caso, no te preocupes, ponte en contacto con nosotros porque tenemos justo lo que estás buscando. Nuestro último modelo, corrige esos inconvenientes.
Aquí puedes ver nuestros dos arrancadores en la actualidad. Cómo puedes ver han ido cambiando en pequeñas mejoras de diseño y usabilidad.
