¿Os ha pasado alguna vez que vais a sacar un tornillo y tardáis más en encontrar la herramienta adecuada que en aflojar el tornillo? Pues en ese punto estábamos nosotros y es que ya lo dice el dicho «En casa del herrero…». Así que nos pusimos manos a la obra y preparamos nuestro organizador de pared.
Para comenzar cogimos un tubo de sección cuadrada de una medida que al cortarlo nos permitiera hacer un soporte, en el cuál pudiéramos colocar dos o tres limas o destornilladores en la misma línea, multiplicando así el espacio útil.
Cortamos el tubo por la mitad pero dejando un pequeño reborde para evitar la caída de las herramientas.
Con un metro marcamos en la chapa las hileras donde irán colocadas las herramientas y con un taladro hicimos un agujero en cada una, los cuales aprovechamos después para cortar con la radial.
Y con esto, sólo nos queda centrar el organizador bien en la pared, en el lugar deseado.
Un organizador de pared como éste es la solución perfecta para mantener tu espacio de trabajo ordenado y eficiente. Estos prácticos accesorios te permiten tener todas tus limas y destornilladores al alcance de la mano, ahorrando tiempo y evitando pérdidas.